El movimiento humano proporcionará la energía para la “Internet de las Cosas”
En The Internet of Things se nos habla de un mundo en el que cualquier objeto podrá estar interconectado con el resto. Esa gigantesca red que llevará Internet a todos los rincones de nuestro mundo necesitará energía para funcionar, y un grupo de investigadores afirma que esa energía la proporcionaremos nosotros con nuestro propio movimiento.
En un ejemplo práctico, todos los paquetes de una oficina de correos transmitirán su posición, origen y destino para poder monitorizar ese envío de forma más eficiente. Y para ser alimentados un estudio demuestra que el movimiento no solo de personas, sino de puertas, o cajones genera una energía que podría utilizarse para alimentar la Internet de las Cosas.
Maria Gorlatova y un equipo de investigadores en la Universidad de Columbia en Nueva York han medido la energía que genera la inercia en la actividad de 40 personas en periodos que llegaron a ser de nueve días. Colocaron dispositivos recolectores de energía para evaluar cuánta podría generar el movimiento de estas personas y de algunos objetos que también se mueven a menudo, como puertas, lápices —sorprendente— o cajones.
Entre las conclusiones destacaron hechos como que el movimiento periódico es rico en la generación de energía: escribir con un lápiz genera una potencia eléctrica destacable (entre 10 y 15 microvatios). También se demostró que los seres humanos son pasivos la mayor parte del tiempo: el 95% de la energía que producimos con el movimiento se genera durante menos del 7% del transcurso de un día.
Dispositivos como los fabricados por Fitbit y otras soluciones de monitorización de la actividad diaria pueden ser candidatos perfectos para recolectar energía a través, precisamente, de esa actividad. Mientras tanto, Gorlatova y su equipo trabajan en diseñar algoritmos para gestionar esa recolección de energía y su posterior almacenamiento y uso.
fuente MIT Technology Review